AUDIENCIA CUIDADANA POR LA VERDAD REGION DEL CATATUMBO.
Ocaña, Norte de Santander
Diciembre 4 de 2008
ANTECEDENTES
En sesión plenaria del Senado de la República del 24 de Febrero de 2007, la Comisión de Derechos Humanos y Audiencias del Senado, en la necesidad de buscar caminos alternos para contribuir a los procesos de construcción de Verdad, Justicia y Reparación, habilitó espacios para escuchar y recoger las denuncias de las víctimas y organizaciones sociales en lo que se ha venido a denominar Audiencias Ciudadanas por la Verdad.
Así la Comisión hace eco a las preocupaciones de la sociedad, en torno a los acelerados pasos hacia la impunidad de los crímenes atroces cometidos por los grupos paramilitares; en respuesta la sociedad acoge la propuesta de las Audiencias Ciudadanas por la Verdad a través del Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado – MOVICE- . En consecuencia se han realizado varias Audiencias Ciudadanas en algunas regiones del país. Por su parte, el MOVICE, Capítulo Norte de Santander, el Comité de Integración Social del Catatumbo – CISCA- la Asociación Campesina del Catatumbo –ASCAMCAT- y un amplio grupo de organizaciones sociales, asumen el reto de realizar la Audiencia Ciudadana por la Verdad para el departamento en mención, especialmente referente a la región del Catatumbo.
JUSTIFICACION
El Catatumbo es una región del departamento de Norte de Santander límite con la frontera venezolana en el nororiente del país. Su nombre deriva de la lengua indígena Barí quiere decir “Casa de Truenos” por ser un faro donde se pueden observar espectaculares tormentas eléctricas. La región está conformada por 10 municipios a saber: La Playa, Abrego, Ocaña, Hacarí, Teorama, Convención, El Carmen, San Calixto, El Tarra y Tibú.
El Catatumbo, es un territorio de grandes extensiones, de vocación agropecuaria, con abundantes reservas, tanto en petróleo como en minerales, rica en recursos hídricos y biodiversidad. Situación a la que se encuentra asociada la grave crisis de derechos humanos que además se relaciona con su posición estratégica, la disputa territorial de actores involucrados en el conflicto armado, el financiamiento de la guerra en algunos casos ligado a factores como los cultivos de uso ilícito, la existencia de altos niveles de pobreza, la negación de derechos debido a factores estructurales y la presencia del Estado reducida a lo militar, entre otros.
Casos de violaciones a los derechos humanos de todo tipo se presentan en la región, innumerables testimonios de las víctimas evidencian la gravedad de la crisis, y la tendencia al aumento de la intensidad del conflicto armado desde 1999. El elevado número de víctimas civiles y entre ellos, dirigentes sociales da fe de que la barbarie paramilitar buscó destruir el tejido social y dejar al Catatumbo sin voz, allanando el camino para la explotación de los recursos naturales. La incursión paramilitar disparó la tasa de mortalidad en todo el departamento, pero sobre todo en El Catatumbo cuya tasa de homicidios es sólo superada por Cúcuta. Sin embargo es de resaltar que el accionar paramilitar en la región no empezó en el año 1999, los paramilitares actúan en la región desde los años ochenta. Lo que distingue el año 1999 es que los paramilitares entran a la zona como fuerza de ocupación, ya no actuando como un grupo que asesta golpes contra dirigentes sociales y luego se retira, sino que permanece y además cuentan con la connivencia, apoyo o falta de control por parte de la fuerza pública.
Ante el temor diseminado a través de los homicidios, masacres, desapariciones y torturas cometidas a lo largo del Catatumbo por las hordas paramilitares, el desplazamiento del campesinado, en su afán por conservar la vida, fue masivo. Fue así como cerca de 30.000 pobladores nativos de la región se vieron obligados a abandonar sus tierras, viviendas, enseres y animales, coyuntura aprovechada por los paramilitares para saquear, destruir, arrasar o quemar lo que encontraron a su paso. Se dice que solamente en el corregimiento de La Gabarra los campesinos perdieron cerca de 5.000 cabezas de ganado, y desafortunadamente aún no existen datos precisos que cuantifiquen las pérdidas económicas sufridas por los pobladores.
Los que permanecieron en el territorio, así como los que retornaron después de soportar la indolencia y el desprecio del gobierno nacional, fueron víctimas de los permanentes retenes paramilitares en los que establecieron fuertes restricciones para el abastecimiento de alimentos, medicamentos e insumos de construcción y producción, que argumentaban iban a servir a la guerrilla o a ser usados en el procesamiento de la coca. Los bloqueos fueron entonces medidas extremas de presión para continuar la tarea de despoblar el territorio, presión a la que también resistieron y aún resisten con estoicismo los campesinos, pues hoy la fuerza pública realiza tanto los retenes como los bloqueos, casi en los mismos lugares y sosteniendo los mismos argumentos, como lo reconocen en un derecho de petición al que responden …se restringe el paso de cantidades excesivas que permitan concluir que dichos alimentos o medicamentos no serán consumidos en su totalidad por la población civil. Es decir, la fuerza pública tiene la potestad para determinar cuánto debe consumir como máximo una familia campesina viva donde viva.
La intensidad del conflicto en la región del Catatumbo disminuye hacia el 2005 con la desmovilización de los grupos paramilitares, desde cuando se implementa una nueva dinámica, bajo una política de militarización que desde comienzos de 2006 permitió la creación de dos nuevas Brigadas, la No. 30 con sede en Cúcuta y la Móvil No. 15 con sede en Tibú, que se suman al Batallón Energético y Vial No. 10 con sede en Convención y al Batallón de Infantería No. 15 Francisco de Paula Santander con sede en Ocaña, buscando alcanzar cerca de 10 mil efectivos militares y una “presencia del Estado” en todo el Catatumbo.
Del 2006 al 2008 se han registrado aproximadamente 55 casos de ejecuciones extrajudiciales atribuibles a la fuerza pública, el 84% de los casos sucedidos en el 2007. Por fuera de estos datos se encuentran los casos no denunciados y que pueden alcanzar un número muy elevado, pues solo en el municipio de Ocaña se habla de 100 casos de personas no reconocidas, muertas en hechos violentos y que pueden estar relacionados con la otra cara de las ejecuciones extrajudiciales, los positivos del ejército en la lucha contrainsurgente.
OBJETIVOS
– Habilitar caminos alternativos para esclarecer los crímenes de Estado con una amplia participación y reconocimiento de las víctimas.
– Adelantar procesos comunitarios de construcción de Verdad y exigencia de Justicia y Reparación integral.
– Construir una propuesta pública, ética y política, desde donde se exprese la visión de las víctimas, sus procesos y avances en la lucha contra la impunidad.
– Contribuir al fortalecimiento organizativo del Capítulo Departamental de Víctimas de Crímenes de Estado de Norte de Santander.
– Fortalecer el acompañamiento y la formación a las víctimas en aspectos psicosociales, jurídicos y políticos, como garantía de avance en la lucha contra la impunidad.
LUGAR Y FECHA
La Audiencia Ciudadana por la Verdad, Región del Catatumbo, se llevará a cabo en la cuidad de Ocaña el día 4 de diciembre dando inicio a las 9:00 de la mañana y culminando a las 3:00 de la tarde.
La participación de tod@s en la Audiencia del Catatumbo, es un paso en la búsqueda de Verdad, Justicia y Reparación
CONVOCAN
Comisión de Derechos Humanos y Audiencias del Senado
Movimiento Nacional de Víctimas Crímenes de Estado MOVICE
Capítulo Norte de Santander de Víctimas de Crímenes de Estado MOVICE
Comité de Integración Social del Catatumbo – CISCA-
Asociación Campesina del Catatumbo –ASCAMCAT
ORGANIZACIONES QUE APOYAN LA CONVOCATORIA
Asociación para la Promoción Social Alternativa MINGA
Red de Hermandad y Solidaridad con Colombia REDHER
Central Cooperativa de Servicios CENCOOSER
Corporación Servicios Profesionales Comunitarios SEMBRAR
Fundación Ciudadana por la Paz y la Democracia – FUCIPAZ
Corporación Colectivo de Abogados Luis Carlos Pérez
ANTHOC –Ocaña
Monseñor Leonel Pineda Guerrero
Personería Municipal de San Calixto
Asociación Juvenil Betlehem
Humanidad Vigente
Asociación de Mujeres para el Desarrollo Social – ASMUDSO
Coordinación Colombia – Europa- Estados Unidos
Unión de Pensionados del Municipio de Ocaña – UPENMOT
Coordinación Departamental del PDA – Norte de Santander
Coordinación Municipal del PDA – Ocaña
Defensoría Comunitaria del Catatumbo